Masas, guerras y fiestas entre el Rosariazo y el Cordobazo
por Javier Trímboli
El año 1969 fue de enormes movilizaciones y levantamientos populares en la Argentina. Corrientes, Rosario, Tucumán, Córdoba… sólo por mencionar las ciudades principales que fueron su escenario. Ocurren y de inmediato se los pone en relación con lo sucedido un año atrás, en ese 1968 que el mexicano Octavio Paz caracterizaba como «año axial», y con la revolución que auguraban. Es mucho lo que apenas pasados unos meses ya se ha escrito y filmado sobre esa hora que se considera decisiva para la Argentina, también para el continente. Descifrar su significado, lo que encierra, se vuelve fundamental.
A cincuenta años del Rosariazo y del Cordobazo, nos proponemos revisitar esos acontecimientos, prestar nuevamente atención a las palabras y las imágenes que los rodearon de cerca.
Anticipamos tres cuestiones, tres problemas sobre los que nos detendremos. Primera: mientras el ’68 que analiza Octavio Paz, así como también la película de Joao Moreira Salles que citamos en el título de este seminario, es de indudable protagonismo estudiantil, en la Argentina la presencia trabajadora le da otro tono. Segunda: las luchas del año 1969, ¿fueron punto de llegada de largos procesos de acumulación de fuerzas o punto de partida que se proyectaban sobre metas futuras? Tercera: las palabras «guerra»y «fiesta» abrazan a esas movilizaciones y levantamientos, los retuercen y fijan en la memoria.

